Sacerdote de la orden de los Dominicos y con un doctorado en Biología, desarrolla una vacuna que podría ser la esperanza para muchos pobres en el mundo.
El sacerdote Nicanor Robles Austriaco que estudió Ingeniería Científica; Luego obtuvo su doctorado en Biología en el prestigioso Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), los últimos 20 años de su vida los ha dedicado a buscar una cura contra el cáncer.
Fundador e investigador principal del «Austriaco Lab», laboratorio que ahora tiene la encomienda de crear una vacuna contra el covid-19, implementada en el Proyecto Pagasa que significa «esperanza» en filipino (una de sus lenguas paternas), la cual podría de ser de gran ayuda para países del tercer mundo y la población en general.
Nicanor Robles se hizo científico antes de ser sacerdote, lo cual no le parece raro al citar que la fe y la razón son ambos dones de Dios .
Desarrolla esta vacuna para ayudar al sector más vulnerable de la sociedad, por sus áreas sobrepobladas, su falta de dinero para poder comprar vacunas para toda su familia y Dios tiene un especial afecto por los pobres que buscan la salud de sus seres queridos, comento para el sitio católico Aleteia.
El trabajo que hace el padre Nicanor es admirable y digno de compartir con todos aquellos que piensan que la fe y la razón no pueden mezclarse, ha dedicado la mayor parte de su vida a buscar una cura contra el cáncer, pero los recientes acontecimientos lo llevaron a unirse a la búsqueda de una vacuna contra el covid-19 con la particularidad de que este al alcance de todos, ejemplo de como un sacerdote puede disponer de todas las herramientas que le da Dios para ayudar a sus hermanos.
Dios lo bendiga